miércoles, 7 de septiembre de 2011

Miedo y Asco en el bar de al lado.

Perdón por la ausencia, pero estos días he andado un poco liado con el idioma y tal. Desde el incidente con las cucarachas he decidido poner todos mis esfuerzos en aprender esperanto. No está tan mal después de todo. La gente de Verokastan te trata como a un ser humano solo con chapurrearlo un poco. Atajate y yo nos hemos aficionado a ir a un bar que hay al lado de nuestro piso, regentado por una chica bastante atractiva, que además ejerce de cocinera y de camarera. A decir verdad ella ha sido mi motivación para aprender el idioma. No me gusta quedar como un tonto delante de chicas bonitas. Poco a poco vamos asentándonos al ambiente de Verokastan. Acostumbrados a una vida más ajetreada, la de ahora nos parece tan absurdamente tranquila que empezamos a sentirnos extraños. Pronto empezarán las clases, pero estoy un poco asustado. Espero que para entonces mi nivel de esperanto haya mejorado lo suficiente. El vecindario sigue tranquilo. También las calles. Esta tarde daremos un paseo por el casco antiguo de la ciudad. Yo voy a aprovechar para dormir ahora. No quiero quedarme dormido en medio del paseo.
Nos vemos luego :)

No hay comentarios:

Publicar un comentario